Una de cincuenta y dos
Necesitará un mazo de cartas. Quite los comodines
y baraje el mazo a conciencia. Pida a su acompañante que tome una carta al
azar.
Pregúntele al péndulo si su acompañante eligió
una carta roja. Si la respuesta es positiva, ya sabe que la carta debe de ser
un corazón o un diamante. Si la respuesta es negativa, la carta será un trébol
o una pica. Pregúntele al péndulo sobre uno de los palos. Suponiendo que la
carta elegida sea una carta roja, pregunte: «¿Es un diamante?». La respuesta a
esta pregunta le dirá si se trata de un diamante o de un corazón. Pregúntele al
péndulo si la carta elegida es una figura (Jack, Reina o Rey). Si la respuesta
es negativa, la carta deberá ser una carta de número. Pregunte por los
números, de uno en uno, hasta que reciba una respuesta positiva.
Una vez consigan dominar esta prueba, pueden
prescindir incluso de las cartas. Simplemente, haga que su acompañante piense
en una carta, y el péndulo determinará de qué carta se trata, exactamente del
mismo modo en el que lo hizo antes.
info@alcominer.com
657 91 85 69
No hay comentarios:
Publicar un comentario