Se distinguen cuatro cuerpos energéticos:
Posee la misma extensión que el cuerpo físico y acompaña siempre al cuerpo físico. Es donde se quedan grabadas todas las experiencias buenas y malas que ha tenido la persona a través de todas sus vidas. El cuerpo etéreo hace las veces de intermediario entre el mundo exterior de la forma física y los mundos interiores o superiores.
También determina la condición del cuerpo físico de acuerdo a lo que contenga su karma.
El cuerpo emocional también es llamado Cuerpo astral. Es el que porta nuestros sentimientos, emociones y las cualidades de nuestro carácter. Ocupa el mismo espacio que el cuerpo físico.
En él se encuentran nuestros pensamientos e ideas, nuestros conocimientos racionales e intuitivos. Su vibración es mayor que la del cuerpo etérico y la del cuerpo emocional, y su estructura es menos compacta.
El cuerpo espiritual, a menudo denominado también cuerpo causal, es el que mayor frecuencia de vibración posee de todos los cuerpos energéticos. A través de este cuerpo experimentamos la unidad interior con toda la vida. Nos une con el ser puro y divino. Es la parte divina que hay en nosotros, inmortal y que perdura en la eternidad.
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Cuerpos sutiles del ser humano |
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