La meditación y los ejercicios de meditación nos aportan infinidad de beneficios para nuestra salud y organismo. Con ellos eliminamos el estrés, aumentamos la capacidad de concentración, ayudan a conciliar mejor el sueño, regulan los niveles del organismo y ayudan a combatir la ansiedad. La meditación es la forma más sencilla para nuestro organismo libere la mente y pueda alcanzar un estado de armonía interior.
Que es la meditación
Con la meditación conseguiremos alejar los pensamientos perjudiciales y dañinos de nuestra mente permitiendo alcanzar una vida más plena y sana en todos los aspectos. Si practicamos meditación a menudo la concentración mejorar, la tensión se verá reducida y poco a poco iremos obteniendo un mayor estado de salud.
Como realizar el ejercicio de meditación
El entorno es muy importante. Tiene que ser agradable, tranquilo, ni muy oscuro ni muy luminoso. Un entorno natural sería ideal, acudir al campo antes de la puesta de sol o llegar antes de que amanezca serán momentos mágicos. Si nos encontramos en una habitación podremos prepararla con velas, aromas esenciales o inciensos.
La posición debe ser cómoda, sentado sería lo ideal. En el suelo o en algún en el que estemos cómodos. Podemos cruzar las piernas y tendremos la espalda recta para no tensionar el cuello ni los hombros. Esto es así para permitir a la energía que fluya sin problemas por toda nuestra espalda.
Reposaremos las manos sobre las piernas y comenzaremos a respirar y a relajarnos.
La respiración: una vez adoptada la posición descrita anteriormente la respiración debe ser agradable, relajada y tranquila. Espiraremos e inhalaremos por la nariz. La boca estará cerrada y la lengua se encontrara pegada al paladar. Usaremos la respiración diafragmática.
La meditación: con los ojos cerrados imaginaremos una llama, un fuego que se va desplazando por todo nuestro cuerpo. A la vez que lo sentimos y visualizamos nos dejamos llevar por la sensación de relajación que nos empezara a envolver. Si aparecen pensamientos déjalos fluir ya desaparecerán por ellos solos.
Y bien esto es todo para empezar a introducirnos en las meditaciones, lo más importante es practicar y practicar más para que realicemos todos estos pasos de la forma más automática posible. Una vez adquirido estos pasos la relajación y la meditación será cada vez más efectiva y en el plazo de unas semanas veremos como nuestros niveles de ansiedad van disminuyendo poco a poco
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