El Tao es el «Camino» que mantiene y ordena todo el universo. Está presente en todo; sin embargo, es insondable. La creación se originó a través de la expresión del Tao de las dos fuerzas complementarias, el «yin» y el «yang». El yin y el yang han de entenderse como lo interior y lo exterior, la oscuridad y la luz, o como cualquier otro par de cualidades complementarias. En la página siguiente aparece una lista más completa de las correspondencias yin/yang.
naturaleza intrínseca».
Sin embargo, la gente no siempre sigue este orden natural de las cosas, y con ello crea la falta de armonía y las enfermedades.
Como todo lo demás, la energía del cuerpo o ch'i ha de reflejar el equilibrio correcto y armonioso del yin y el yang. El desequilibrio del yin y el yang dentro del cuerpo es sinónimo de enfermedad.
Los chinos se preocupaban en particular por el tiempo y los factores climáticos porque éstos podían ser en ocasiones muy duros. Se dieron cuenta de que una prolongada exposición a unas condiciones climáticas extremas podía alterar el armonioso equilibrio entre el yin y el yang. Y creían que eran más insidiosos aún los perjudiciales efectos de emociones dañinas como la cólera, el miedo, la envidia, la preocupación o el pesar.
Los chinos se interesaban mucho (y lo siguen haciendo) por la comida y veían claramente la relación existente entre la dieta y la salud. Analizaban su alimentación no en términos de composición química como se hace actualmente en Occidente, sino en cuanto al yin y al yang: según los efectos caloríficos o refrescantes, y la acción estimulante o sedante de los alimentos.
Los chinos conocían otros factores, pero siempre los veían a la luz de sus creencias y concepciones cosmológicas.
Hoy día estamos empezando a comprender de nuevo lo que los chinos descubrieron hace varios miles de años: que la enfermedad está principalmente causada por un estilo de vida inadecuado y por nuestro poco interés en fomentar la salud. En gran medida elegimos y creamos nuestras enfermedades. Esta antigua forma de pensar ha hecho que nos empeñemos en curar las enfermedades; el camino de la «acupuntura» es vivir armoniosamente para evitar en
primer lugar que surja alguna enfermedad.